La exposición propone a los visitantes adentrarse en el viaje que los miembros del Instituto de Estudios Catalanes hicieron hace cien años a los Pirineos. Un viaje decisivo para el arte románico catalán, que supuso la puesta en valor de este patrimonio. En la muestra se puede contemplar un conjunto de obras realizadas por uno de los primeros y principales escultores románicos del cual se conoce el nombre, el maestro Gilabertus, activo en Toulouse hacia mitad del s.XII.