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Pintar hace mil años. Los colores del románico

¿Quienes eran y con qué colores pintaban los artistas hace mil años? Estos interrogantes encuentran respuesta combinando diversas vías de estudio: las nuevas tecnologías de laboratorio, los datos de los recetarios medievales y la investigación de los agentes implicados en la realización del objeto artístico, desde quien encargaba la obra hasta el artista, pasando por el público a quien iba dirigida. Actualmente todavía se tiene la opinión de que el románico era un arte austero y de gran simplicidad. Y no era así, porque a pesar de que las iglesias hoy se nos muestran con las paredes desnudas, lo cierto es que en época románica los colores vivos y brillantes invadían todos los rincones. Los muros, las tablas_que revestían los altares, los baldaquinos que los cubrían y las esculturas que ornaban los templos estaban pintados con colores muy expresivos. La exposición Pintar hace mil años. Los colores del románico pretende desvelar, por tanto, algunos aspectos sobre la identidad y la formación de estos pintores, sobre quien les proporcionaba los medios para su tarea y cómo obtenían las materias para dar color a sus obras. Esta exposición, organizada por el Museu Episcopal de Vic, presenta los resultados de tres años de investigación realizada en el marco del proyecto Magistri Cataloniae. Artistas, patronos y público. Cataluña y el Mediterráneo (siglos XI-XV) de la Universidad Autónoma de Barcelona que ha contado con la colaboración del MEV, del CETEC-Patrimoni (IQS-UAB), y del Centre de Restauració de Béns Mobles de Catalunya. Con este objetivo se han analizado obras como el baldaquín de Ribes, los frontales de Puigbò y Espinelves, el altar de Lluçà y las pinturas murales de San Tomás Becket de Santa Maria de Terrassa, que son las protagonistas de esta exposición.

Blog de la exposición

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